PERDER EL MIEDO
Me siento extraña en todos los lugares
ya no me alimento de barras de bar
Tu propio cuerpo me queda lejos
de la distancia que mis brazos abarcan
vuelvo a sentir las sacudidas de dolor
que en otros otoños no tuvieron sentido
Y mientras huyo de lo que dicen los demás
a pesar de que parece tener mas sentido que mis pensamientos
Pero me escapo hacia un agujero en la noche
que parece no terminar en ti.
Los otoños que me queden
seran solo el recuerdo de tus palabras
afiladas, hirientes.
de madrugada y sin un chaleco salvavidas
que me proteja de tu indiferencia.
Triste, enferma, soñolienta y sin hambre
me iré sin hacer ruido para no molestar.
Y ya no te tendré miedo.
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