Aun no es nochevieja
De alguna extraña manera, siempre he pensado que para mi el año comienza el día de mi cumpleaños, y los 365 de los que hago repaso comienzan el 15 de marzo y acaban el 14 de marzo del año siguiente. No se muy bien porque, pero siempre lo he celebrado así interiormente, como si yo me rigiera por otro calendario que no fuera el lunar o el romano. Así que podría decirse que mi año nuevo se celebró con cava (una botella que sustituía a la que se rompió), un moreno delgado que aun apenas conocía, y algunos buenos propósitos para los 365 días restantes a partir de ese momento.
1 comentario
Sibel -
Y, ante mi falta de espíritu navideño, por estas fechas, normalmente me contento con pensar que pronto llegará la primavera y, al salir del trabajo, aún será de día.